Ha sido cosa seria esto de ir a unas elecciones con un Consejo Electoral que no ha hecho ni la mueca por cumplir con las funciones que tiene asignadas en la Ley y que son las que justifican su existencia misma. Ante un órgano electoral que sólo le falta dar resultados antes de la elección está complicado ir a votar, pero no ir a votar también esta complicado. Es una decisión personal que en condiciones normales debe ser por quien voto, en lugar de voto o no.
Por un lado está el asunto de dejar de ir a votar, “para que no se me lo roben” o porque la vez pasada se lo robaron y esta no. Es cierto que no hay campaña visible y que poco entusiasmo, en Managua. Completamente comprensible, pero bastante resignado. Si no vas a votar, activate! Podés hacer observación, por ejemplo, pero quedarse en su casa porque alguien se roba los votos, mala idea.
Del otro lado está la opción de cumplir con el deber y derecho ciudadano: votar. Sabiendo que se pueden robar la voluntad como las otras veces, y que las opciones electorales no son las que quisiéramos. Pero yo sigo creyendo que los votos son la manera más perfecta que el sistema nos da para lograr cambios. No es suficiente, pero hay que rescatado.
Hagamos lo que hagamos, no dejemos de buscar el país que nos merecemos, que definitivamente no es este.